Los juegos de azar son juegos en los cuales las posibilidades de ganar o perder no dependen únicamente de la habilidad del jugador, sino que el azar y la suerte determinan su éxito.
En algunos juegos de azar el jugador puede influir enormemente en el desarrollo del juego, como es el caso de los juegos de naipes o el póquer. Pero el resultado final siempre depende de la fortuna.
Estos son los cuatro juegos más populares en todo el mundo, donde el azar escoge su ganador:
- La Lotería
Su origen se remonta al siglo XV, cuando los comerciantes genoveses idearon este sistema como táctica de venta, al estar formados los premios por mercancías.
La palabra Lotería se supone que procede del idioma italiano, ya que las dos primeras sílabas de las palabras hacen referencia a lotta, que significa lucha en Italia, haciendo mención a la lucha entre el jugador y la suerte.
La lotería, como todos sabemos, en teoría la podríamos reducir y explicar como un juego de azar en el que cada uno de los jugadores compra un boleto con una serie de números o combinaciones, los cuales para ganar deben coincidir con el resultado final.
Dichos números han de ser siempre fruto de la extracción mediante el azar. Así, la probabilidad de que nos toque un premio mayor dependerá en gran medida de la probabilidad y de la suerte.
La lotería comienza a dar sus pasos en la historia en el año 1763, concretamente durante el reinado del Rey Carlos III. No vamos a entrar a recordar su historia ni sus premios, pero sí vamos a recalcar que, en España, este fantástico juego lo tenemos asociado a la Navidad, la ilusión y la más que posibilidad de ver realizados nuestros sueños y proyectos.
2. Piedra, papel o tijera
Es uno de los juegos que, de niños, todos hemos jugado hasta casi cansarnos o aburrir a las personas mayores de al lado.
Como sabemos, se trata de un juego en el que las manos deben estar debidamente ubicadas en la espalda de cada jugador. De esta forma, se oculta el movimiento mientras se cuenta hasta tres, para indicar cuándo se debe sacar la mano con la figura que se ha elegido.
Entonces hay tres posibilidades, las cuales se combinan con 3 posibles movimientos, cada uno de los cuales representa a la piedra, otra al papel y la tercera a la tijera.
Para ganar una partida, uno de los jugadores debe realizar un movimiento que sea superior al de su contrincante. Siendo las normas muy sencillas: la piedra es superior a la tijera así que le gana, la tijera es superior al papel por lo que le gana, y, por último, el papel cubre a la piedra, así que el jugador que saque papel ganará al que opte por la piedra.
En caso de haber empate, se deben jugar varias partidas hasta desempatar. Así de simple y de entretenido.
3. Cara o cruz
Cara o Cruz es considerado como el juego de azar más antiguo.
Cuentan que sus orígenes pueden remontarse a cuando estaba empezando a circular la moneda en el Imperio Español.
El cara o cruz viene del diseño de la moneda con la que se juega: la cara del emperador y cruz en el anverso.
Como curiosidad, hay que contar que en sus inicios era conocido como el juego de castillo o león,porque antes de la época del Imperio se utilizaban monedas con estas dos figuras en cada cara.
Este sencillo juego utiliza sólo una moneda que es lanzada al aire una vez que los participantes han escogido cara o cruz. Gana el que adivina cuál de sus lados es el que caerá boca arriba. Las probabilidades de acertar lógicamente se reparten en un 50%.
4. Bingo
El Bingo es ese conocido y entretenido juego que está compuesto por un bombo en el que en su interior hay unas bolas numeradas. Unos cartones con números aleatorios impresos y fichas que se usan para marcar cada uno de los números que van saliendo.
En el bingo gana el primer jugador que logra marcar las casillas completas de un cartón, es decir, debe tener todos los números que componen el mismo, tachados. El bingo llegó a España en el siglo XIX, cuando Primo de Rivera se encontraba en el poder. Poco a poco el bingo fue adquiriendo cada vez mayor protagonismo hasta el día de hoy, que nadie puede negar que ha jugado al menos una vez en su vida a este entretenido juego de azar.
Los juegos nos evaden de las preocupaciones, nos despejan la mente y, sobre todo, nos entretienen. Tienen la facultad de sacarnos una sonrisa y nos trasladan a momentos felices.
Los juegos de azar, como muchos otros juegos, no sólo los podemos compartir y disfrutar en grupo, también nos acercan a los que queremos. Nos conceden deseos cuando ganamos, o cuando nos liberamos de nuestras ataduras.
Juguemos más y soñaremos mejor.
Siempre Loterías. ¡Suerte!