Este año nos hemos sorprendido con lo rápido que os habéis llevado los 13 para el sorteo de Lotería de Navidad. Hay cientos de números que os gustan, que os recuerden a un momento especial y que se identifican con vosotros de alguna manera. Pero por alguna razón, el numero 13 siempre ha sido muy demandado. Algunos os preguntaréis, ¿no es el número de la mala suerte?
Y así es, el numero 13 siempre ha ido ligado a la mala fortuna, pero no todos sabemos las explicaciones que se esconden tras esta asociación. Y es que no solo afecta a no realizar actividades importantes un martes o viernes 13, o como en algunos países que se saltan esta planta en algunos edificios, sino que se trata de una superstición mucho más extendida.
Uno de los motivos más históricos en la cultura occidental se remonta a la última cena de Jesús, a la que acudieron sus 12 apóstoles y él. La curiosidad de esto es que en teoría, Judas no debería haber ido, por lo que los asistentes hubiesen sido solo 12. Si a esto le sumamos que Judas fue quien traicionó a Jesús, tiene sentido que esta cifra no sea muy bien vista.
El origen del numero 13 como número de mala suerte se debe también a que no aparece en el código de Hammurabi, uno de los conjuntos de leyes más antiguos creado en el imperio babilónico por el rey Hammurabi. Todas estas leyes están numeradas de forma sucesiva, pero no hay rastro del numero 13. Hay quienes consideran que esto se debe a que era considerado un número de mal augurio, pero los más escépticos consideran que se trata de un simple error de redacción.
Si seguimos retrocediendo en el tiempo, en la edad media, cuando se creía en todo lo relacionado con brujería y hechizos, se pensaba que los grupos de brujas estaban formados por 13 de ellas.
Otra teoría de carácter histórico antecede al cristianismo, que se basa en una antigua leyenda nórdica que tiene a los dioses como protagonistas. Esta historia nos recuerda bastante a la última cena, ya que en este caso doce dioses se reunieron para cenar en la Valhala. Pero el dios del mal, Loki, apareció sin haber sido invitado. Terminó por asesinar a Bladur, el dios de la luz, por lo que el numero 13 fue la forma de representar este infortunio.
No sorprende como el miedo al numero 13 se ha ido consolidando durante tantos años. Por ejemplo, en el siglo XIX, en Europa existió el temor de que se sentaran 13 personas en la mesa. Se creía que era peligroso porque asociaban que uno de los 13 moriría en menos de un año. Seguro en su día tenía una explicación convincente para que tantas personas compartieran el mismo temor, pero nos sigue sorprendiendo todo lo relacionado con este número.
Las supersticiones relacionadas con el numero 13, así como otras muchas asociaciones con la buena y mala suerte, ya sea en forma de amuletos o fetiches sobrenaturales, es una manera de creer en algo que escapa más allá de la razón y de crear una realidad propia. Como siempre decimos, puede ser verdad o no. Pero quién sabe, a lo mejor este año el numero 13 se estrena dando su primer Gordo de lotería de Navidad y deja atrás la mala fama que tiene.
Y si no puedes esperar al sorteo del próximo 22 de diciembre, para este sábado el 13 está esperando a salir, ¿te haces con el tuyo?