Si definimos como forofos de la lotería del Niño a aquellos seguidores que, pasando la línea del apasionamiento, echan su ancla en un sentimiento incondicional hacia el Sorteo del Niño. Ciertamente podríamos decir, sin equivocarnos, que más que adeptos a este sorteo son hinchas casi a la sombra de un grandísimo sorteo que, para muchos, queda menguado por el brillo del Extraordinario de Navidad.
Hemos conocido partidarios del Niño hasta el punto de coleccionar sus décimos jugados por años, fotocopiando los boletos premiados, o guardar en la cartera el décimo plastificado que les recuerda el número con el que juegan todas las navidades.
Personalmente, siempre me ha llamado la atención una conocida que cada año juega diez o más números seguidos. Utiliza un método sencillo. Ella parte de un número referente del sorteo anterior del Niño: 24345, 24346, 24347, 24348, 24349… siendo curioso que el resto del año su juego pasa totalmente desapercibido. Porque participa con la normalidad con la que todos seleccionamos unos números con los que deseamos atraer la Dama de la Suerte y su hija la Ama Fortuna.
El Sorteo del Niño no escapa tampoco a los rumores sobre su origen. Unos dicen que nació el Día de Reyes. Otros exponen que su nombre le viene de ser heredero de los sorteos benéficos conocidos como Rifas Nacional del Niño, que organizaba la duquesa de Santoña a finales del siglo XIX.
Tradicionalmente, el Sorteo del Niño se celebraba el 5 de enero, víspera de la fiesta de la Adoración de los Reyes Magos. Fue en el año 2000 cuando se decidió su traslado al día siguiente, al 6 de enero. El razonamiento fue claro. Al tratarse de un día festivo, caracterizado por un ambiente muy familiar y alegre, el sorteo acrecentaría aún más su popularidad, lo que estimularía la tradición de desayunar el roscón de Reyes mientras se veía el Sorteo del Niño en la televisión.
Los auténticos entusiastas de este sorteo del Niño les oigo año tras año repetir los mismos estribillos: ¡No sé cómo todo el mundo apuesta por llevarse el GORDO, cuando el NIÑO reparte muchos más premios! ¡No lo acabo de entender!
Y es que la Lotería del Niño reparte 700 millones de euros en premios, lo que le convierte en el segundo mayor sorteo de la Lotería Nacional. El primero, lógicamente, es el Sorteo Extraordinario de Navidad, que reparte la increíble cifra de 2.400 millones de euros en premios.
Y sí, tienen razón los que todos los años declaman las mismas frases y los entusiastas forofos del Niño: la Lotería del Niño reparte mucho dinero en premios, pues aparte de los grandes premios, hay aproximaciones al primer premio y al segundo premio, así como tres reintegros, dos terminaciones de cuatro cifras, catorce terminaciones de tres cifras y cinco terminaciones de dos cifras. El resultado es que uno de cada tres décimos de la Lotería del Niño consiga premio, lo que convierte al Sorteo del Niño en la lotería con más opciones de ganar. Por eso es normal que este Sorteo tenga tantos seguidores o adeptos.
Seas incondicional de los extraordinarios o de los semanales, recuerda:
La buena suerte no llega, hay que salir a buscarla.