El ser humano tiene la facultad de poder pensar, razonar e incluso cuestionarse el porqué de la vida, de los hechos, del Universo… o simplemente de los sucesos acontecidos en el día.
Lo racional es la característica que describe al hombre y lo diferencia del animal, ya que el ser humano es el único que posee capacidad humana para pensar, entender, evaluar y, actuar bajo ciertos principios o fundamentos basados en la ciencia, investigación o en la experiencia que lo ayuden a conseguir un beneficio u objetivo.
Sobre las conductas racionales, las ciencias exactas e incluso las matemáticas, la física, el conocimiento, la experiencia… se ha escrito tanto… son temas tan densos, controvertidos y tan contundentes en muchos casos, como la gravedad, las fuerzas centrífugas, los quarks o la radiación por nombrar algunas.
Las fuerzas de la naturaleza están bajo el microscopio de los científicos y de los investigadores. Los avances en la tecnología, en el estudio en todo tipo de ciencias y competencias nos hacen entender y explicarnos lo que sucede a nuestro alrededor. Nuestro afán por saber y obtener respuestas es inagotable, insaciable.
Pero siempre hay algo que se escapa a nuestro entendimiento y a nuestra razón. La suerte. La casualidad. El tiempo. El futuro. Los astros. El Universo. Otras galaxias…
Sabemos muchas cosas, las hemos demostrado hasta la saciedad. Pero hay tantas conexiones que se repiten, coincidencias inexplicables, casualidades que marcan nuestro destino y nuestra vida, que es normal que nuestro afán por controlar y saber, para sacar el máximo beneficio, nos lleven a pensar y estudiar los astros y la relación que les une a nuestra vida y a nuestro destino.
Mentiríamos si dijéramos que conocemos esa relación que científicos, investigadores de prestigiosas universidades y doctores en esas materias llevan años intentando recopilar. Los nexos, los vínculos entre los números, los astros, la suerte, la creación del mundo y la vida, son tan fuertes y reales como inaccesibles.
Pero aun así, es innegable que esta unión en la naturaleza es tan real, inmutable y constante que es imposible no percibir, aunque no podamos demostrar, esta fusión entre las fuerzas de la naturaleza y su creación.
Dando por hecho este principio fundamental que postula que en este mundo todo unido y está relacionado formando un todo, es normal, que a veces sintamos y sepamos con total seguridad, que nos podemos y debemos fiar de un pálpito, de una sensación irracional, o incluso de un sueño, que nos lleva a elegir un día, un número o a hacer algo llevados por lo que a veces llamamos: hacer las cosas con el corazón, con las entrañas o marcados por un impulso incontrolable.
Son muchos los que no pueden explicar cómo la llamada suerte les llevó a no coger un tren que tuvo un accidente. A entrar en un bar y conocer con felicidad a su pareja y el amor de su vida… o marcar unos número en la lotería y cambiar su vida.
Es innegable que el instante en el que nacemos, como parte que somos de la naturaleza, estemos influenciados por los astros que se encuentran en ese momento en el firmamento formando las constelaciones, dando lugar y marcando así nuestro horóscopo y quizás nuestro paso por la vida.
Según el día en el que hayas nacido, estarás bajo el cobijo de un horóscopo. Según tu signo del zodiaco, tendrás unos números, unas pautas, más las que seguro que te marca tu instinto.
He aquí los números que han escogido los nacidos en los diferentes meses como sus números de la suerte:
- Los Géminis: el 3, el 12 y el 18.
- Los Aries son: el 7, el 17 y el 21.
- Los Cáncer son: el 2, el 8 y el 12.
- Los Tauro son: el 9, el 3 y el 22.
- Los Leo son: el 5, el 14 y el 27.
- Los Virgo: el 6, el 12 y el 17.
- Los Libra son: el 4, el 13 y el 15.
- Los Escorpio son: el 8, el 16 y el 23.
- Los Sagitario son: el 7, el 11 y el 18.
- 10. Los Capricornio son: el 1, el 7 y el 14.
- 11. Los acuario son: el 5, el 8 y el 22.
- 12. Los Piscis son: el 8, el 13 y el 21.
Las uniones entre los astros, la suerte y la lotería son tan especiales y únicas, como lo son las relaciones entre las personas, la naturaleza y el ritmo de la vida.
Déjate llevar por las influencias de la naturaleza y sueña. Porque la vida es ilusión y conexión. ¡Suerte en la vida!
Y recuerda, si de verdad tienes un sueño… Loterías.