La noticia ha salido en todos los medios de comunicación americanos y también europeos: El ganador del segundo mayor bote de lotería de EE UU… por fin aparece… el misterioso ganador del premio de lotería más gordo de la historia….seguirá en el anonimato…
Hasta la fecha, lo único que se sabía es que una persona había sellado un boleto de lotería en una tienda de Simpsonville, Carolina del Sur. Fueron pasando los días, los meses… y nadie aparecía con el boleto ganador.
Tras cinco meses esperando, después de mantener a todo un país en vilo, por fin apareció un misterioso afortunado que reclamó con éxito el premio de 1.500 millones de dólares de la Lotería Mega Millions.
El agraciado con esa inmensa fortuna vive en Carolina del Sur, como era de prever al sellar el boleto en Simpsonville, Carolina del Sur. Llevándose la mayor cifra acumulada pagada a un solo ganador en la historia de Estados Unidos.
La persona afortunada con el enorme premio pidió permanecer en el anonimato, algo lógico si pensamos que reside en un pueblo rural de 20.000 habitantes, creándose tal expectativa que, con toda seguridad, su rostro sería portada de todos los periódicos locales y nacionales.
Podemos imaginar que todos en ese pueblo sentirían, lo que nosotros a miles de kilómetros de allí, una mezcla de envidia, deseo y, por supuesto, ilusión por encontrarse algún día en esa situación que permita cumplir todo lo soñado, cerrando las puertas a deudas o trabajos indeseados.
Muchos son los curiosos que se han quedado con las ganas de saber quién fue el afortunado vecino que se ha hecho millonario de la noche a la mañana, quizás les fuese conocido o cercano.
La comisión de la lotería señaló en un comunicado que dicha persona optó por recibir el efectivo en un único pago un total de 877.784.124 dólares, el mayor importe a un ganador individual en la historia de los EE.UU. También pudo aceptar el premio en cuotas durante 29 años. Cualquiera de nosotros desearíamos estar en esa tesitura: ¿Qué hago: cobro de una tacada los 877.000.000 dólares o todos los meses…?
Lo curioso, o lo caprichoso del tema, es lo que la comisión de la Lotería detallaba sobre lo sucedido. El ganador se maravillaba de cómo cada decisión que había tomado ese día le había llevado a la tienda, en ese justo momento, a comprar el boleto. Relatando cómo el afortunado millonario permitió que otro cliente comprara un boleto de lotería Mega Millions antes que él, acto clave para resultar ser el agraciado suertudo.
El comunicado de la comisión de lotería se expresaba con estas palabras: Un sencillo acto de amabilidad terminó en un resultado impresionante.
El estado de Carolina del Sur también está de suerte, pues recaudará 61 millones de dólares en impuestos sobre la renta del ganador.
También el establecimiento que vendió el premio, el mini supermercado KC Mart de Simpsonville, recibirá 50.000 dólares por haber entregado el boleto ganador.
El final de esta historia mantuvo a muchos en vilo. Tras muchas especulaciones e intrigas, muchos hicieron sus quinielas apostando quién podría ser, o qué podría haber sucedido para no acercarse a recibir el premio. El ganador tenía hasta las cinco de la tarde del 19 de abril para presentar el boleto ganador. Por fin, como en una película y tras meses de sospechas, hipótesis y deducciones apareció, pero nadie vio su rostro ni supo de su identidad. Quizás hagan una película, una serie, o el nuevo millonario se dé a conocer por sus buenas obras.
El tiempo nos lo dirá. Quizás la vida nos sorprenda con un poco de esa suerte que tuvo este amable jugador, hoy nuevo rico.
Si sueñas… Loterías. Porque está claro que la suerte sonríe cada día.